SUD LGBT
Si no hubiera invitado a la gente que amo a la boda (o si hubieran elegido no asistir), se hubieran arrepentido. Mi sugerencia es extender tu amor y amabilidad a aquellos que rechazan tu invitación. La empatía puede recorrer un largo camino para cambiar los corazones.
Me quedo con lo bueno. Ha sido una conferencia de muchos desafíos, dinámica, variada y sobre todo de aprendizaje. Aprendizaje no tan solo para mí, si no también para el grupo de Afirmación Chile, que ha crecido para bien.
He visto de todos los colores, brillantes hermosos, gloriosos, algo que escuché y lo creo firmemente es que Dios los ama, Dios tiene un propósito muy importante para ustedes.
Te prometo que aunque los que están más cerca de ti te dañen, aquí en Afirmación cantaremos juntos una y otra vez, que Dios hace habitar en Familia a los solitarios, saca a los cautivos hacia la prosperidad, que a ti que saliste de tu pueblo el Señor derramo el poder del Cielo para iluminar tu camino, poner una nube en el día y un luminar en tu noche, porque Dios tomó sus dones y te los ha entregado a ti.
¿Ama al pecador, odia el pecado? Tendría que ser realmente: ¡Ama al pecador, aborrece tu propio pecado! No tengo tiempo para odiar sus pecados. ¡Hay demasiados de ustedes!
En el crepúsculo de la década del 40 en el siglo pasado, el Presidente George A. Smith escribió “homo sexualidad / sin explicación” …. Hoy y a pesar de las barreras parecen existir algunas luces y una actitud más comprensiva hacía nuestras vidas. Cualquier esfuerzo que logremos en el papel de ser pioneros y tender puentes puede tener la clave para salvar una vida.
Explora los artículos que preparamos sobre la Conferencia Anual de Afirmación – México. Busca contenido adicional en nuestras redes sociales. Comparte este mensaje con las personas que te rodean. Disfruta de “Vivir en Armonía”.
por Adrian Sanchéz Roman Plasmar en una hoja testimonios y enseñanzas tan inspiradoras no es sencillo cuando el regocijo en la actividad es tal que las palabras no son suficientes. El pasado…
Preguntas frecuentes que se hacen los padres de familia cuando un hijo dice: “Mamá, papá, soy gay”. ¿Qué hacer? ¿Qué decir? ¿Qué esperar?