saltar al contenido

Autoaceptación y progreso

Boda de Ricardo Guerra 02

11 de septiembre de 2016

Escrito por Ricardo Guerra

Boda de Ricardo Guerra 02

Mi nombre es Ricardo Guerra, soy miembro de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos días desde hace 34 años y también soy homosexual.

Aunque la Iglesia no lo acepta, nuestra orientación sexual está con nosotros desde el momento en que nacemos; y, tal vez, desde antes. En mi caso desde niño supe lo que era, desde niño estoy consciente de mi orientación sexual y el saberlo y reconocerlo me ayudó a entender que yo era diferente, diferente de mis hermanos, de mis amigos, diferente de los demás. Si bien es cierto que de momento no entendí del todo lo que esto implicaba, jamás sentí pesar, dolor, vergüenza o arrepentimiento. Sin saber cómo compartirlo con mi familia o amigos opté por no platicarlo con nadie, preferí quedarme callado porque tampoco sentí la necesidad de hacerlo. No había en mí la necesidad de acercarme a mis líderes de la Iglesia para comentarlo. Solo sabía que al ser parte de la Creación de Dios no podía ser malo lo que yo sentía. Y decidí mantenerme unido a Él a través de la oración confesando a Él mis sentimientos.

El crecimiento dentro de la doctrina de la Iglesia desde pequeño me hizo creer que yo era el único que era diferente, que no había más mormones como yo. Cuando conocí Afirmación hace aproximadamente 15 años descubrí que no era el único. Descubrí que somos muchos los hijos de Nuestro Padre Celestial que compartimos estas dos cualidades: ser mormón y gay.

¿Cómo lo acepté, cómo me asumí como gay? Todo ha sido parte de un proceso a lo largo de mi vida. No es un proceso de días o meses, a mí me ha tomado años aceptarme y entenderme como un hombre homosexual. La autoaceptación para mí representa:

La virtud que me permite quererme a mí mismo y acerptarme como soy, evaluando mis sentimientos tanto positivos como negativos y reconociendo el valor que, como persona, tengo y permanecer consciente de esto es un requisito para lograr un cambio en nuestras vidas, aceptando que no podemos cambiar los comportamientos ni pensamientos de los demás, pero sí podemos cambiar el nuestro. Esto forma parte de aceptar y aprender.

Sé que el proceso de auto aceptación es diferente para todos, ya que todos nos encontramos en diferentes circunstancias de vida y nuestra posición con respecto a la Iglesia también es muy diferente: hay quienes se mantienen fieles a la Iglesia desarrollando llamamientos con toda diligencia, habemos quienes por propia voluntad hemos decidido alejarnos de la Iglesia y hay a quienes se les ha separado de la misma por no considerarlos dignos de permanecer en ella.

Boda de Ricardo Guerra 03

Hace 3 años, cuando tomé la decisión de casarme con quien en ése entonces era mi pareja, también tomé la decisión de separarme la Iglesia ya que sabía que no tendría cabida como un hombre casado con otro hombre, nunca fue mi idea jugar un doble papel en la vida; supe que nunca iba a poder cumplir con el sagrado convenio del matrimonio tal y como la Iglesia lo establece, y decidí separarme porque mi postura tampoco ha sido la de atacar a la Iglesia, su doctrina oa los miembros, respeto en todos el derecho a tomar las decisiones como cada cual lo considera y el mismo derecho aplico para mí. Actualmente me asumo públicamente como un hombre mormón homosexual feliz, casado con otro hombre con quien formo una familia y contando con la aprobación, apoyo, respeto y amor de mi familia de origen, amigos y compañeros de trabajo.

Tengamos presente que nuestro camino no se detiene. Sea cual sea nuestra posición en ésta vida debemos recordar que estamos aquí para alcanzar nuestro desarrollo como hijos e hijas de Dios y para ser felices, pero a esto le precede un arduo trabajo.

Hay muchos caminos para desarrollar nuestro progreso, hay muchas maneras de hacerlo. Yo les comparto 5 puntos muy sencillos que a mí me han resultado:

  1. Inicia Con Algo Pequeño

Cada historia de éxito se remonta a un paso pequeño. Todo empieza por el inicio y por muy pequeño que sea, éste puede ser el primero de muchos que te lleven a lograr tu objetivo. Si todos los días damos ése primer paso fortaleceremos ese músculo en nuestra vida y nuestro cerebro.

  1. Sigue Con Pasos Pequeños

Paso por paso, con calma y disciplina, podemos llegar a nuestros objetivos sin necesidad de desesperarnos o acelerarnos para luego desanimarnos y desfallecer.

La principal ventaja de los pasos pequeños, es el progreso constante. Esto construye confianza, aumenta nuestra motivación, y, lo más importante, nos trae resultados reales.

  1. Forma Hábitos

Los hábitos son actos constantemente repetidos sobre los que se basa nuestra vida. El tiempo para formar un hábito depende de aquello que queramos fortalecer. Alguien dijo en una ocasión: "SI HAY QUE SER ESCLAVOS DE NUESTROS HABITOS, SEAMOS ESCLAVOS DE NUESTRO BUENOS HABITOS"

Desarrollemos hábitos saludables y tengamos claro el objetivo o la razón de ese hábito para motivarnos a conseguirlo.

  1. Ensayo Y Error

Los cambios no se logran a la primera, puede ser que tardemos en ver resultados y que estos no sean lo que buscamos.

Un aspecto importante del ensayo y error es averiguar por qué una solución en particular, no funcionó. Cuando te das cuenta de qué fue lo que pasó, puedes elegir la próxima vez una alternativa diferente.

  1. Enfócate

El enfoque es lo que nos permite lograr lo que queremos en la vida. Es la elección de un camino y la decisión de no prestar atención a cualquier cosa que entre en conflicto con nuestro objetivo. El enfoque es la capacidad de aplicar lo que aprendemos.

El tiempo nunca se detiene, la vida nunca para… No importa si nos quedamos acostados todo el día, no importa si vamos a trabajar de lunes a lunes, no importa si tenemos amigos o no, no importa si hacemos el bien o el mal, no importa si hacemos mucho o poco, etc.

Lo cierto es que el reloj nunca dejará de funcionar y siempre irá hacia adelante.

Boda de Ricardo Guerra 03

Por qué no aprovechar ese tiempo que nunca se detiene para ser mejores ?, para alcanzar nuestros sueños, para hacer bien a otros ya nosotros mismos, para dejar una huella en el mundo?

El lema de ésta Conferencia es “ASI ALUMBRE VUESTRA LUZ”, ¿por qué no alumbrar con nuestra luz a quien la necesita? Hay muchos de nuestros hermanos fuera de cargando el dolor que les provoca el sentirse rechazados, señalados, abandonados por la Iglesia, por sus familias, por sus "amigos".

Si bien es cierto que nosotros no decidimos nuestra orientación sexual, lo que si es cierto es que nuestro progreso es responsabilidad nuestra. El desarrollo de nuestros dones, talentos, capacidades y potenciales solo nos corresponde a nosotros y en esto debemos enfocar nuestra lucha diaria. Nuestras vidas no tienen por qué estar marcadas por el dolor, por la angustia o el miedo. Trabajemos para hacernos de las herramientas que nos permitan tener confianza y fuerza en nosotros mismos, que nos den libertad de actuar y decidir correctamente y que nos permitan mostrarnos al mundo tal y como somos.

Sin duda alguna sé que estar aquí reunidos en este lugar es una oportunidad muy valiosa; y aunque solo seamos una persona más entre otras tantas, SE QUE AL ESTAR UNIDOS PODEMOS MARCAR UNA DIFERENCIA POSITIVA FRENTE A LOS DEMAS. PODEMOS TRANSFORMARNOS DIA A DIA EN UNA PERSONA MEJOR.

Como miembro de la Iglesia sé que Jesucristo es Nuestro Salvador, que Nuestro Padre Celestial nos conoce desde antes de nacer y nos ama tal y cual somos porque Él sabe el deseo de nuestro corazón.

Y para finalizar solo quiero pedirles que cada día recordemos nuestra esencia y nuestro valor como hijos e hijas de Dios, y que ante cada tristeza, ante cada alegría, ante cada éxito, ante cada fracaso y ante cualquier adversidad de la vida recordemos las palabras de José Smith en la parte final del décimo tercer artículo de fe: “SI HAY ALGO VIRTUOSO, O BELLO, O DE BUENA REPUTACION O DIGNO DE ALABANZA, A ESTO ASPIRAMOS”. En el nombre de Jesucristo. Amén.

 

Comentarios de 2

  1. Esteban Zelaya en 12/09/2016 en 5:47 PM

    Hola Ricardo! Es un enorme placer verte y leerte después de tantos años. Y verte casado y saberte feliz es un regalo que la vida me da. Saberte resuelto a caminar siempre adelante con esa claridad de miras y con esa fe tan firme en lo que sabemos y en lo que esperamos es motivo de inspiración. Gracias Ricardo por esos maravillosos ejemplos que nos das. Desde Acapulco, tus amigos y hermanos, Esteban y Daniel. Recibe nuestros parabienes por tu matrimonio y hazlos extensivos a tu cónyuge.

    • Ricardo Guerra en 09/10/2016 en 2:35 PM

      Gracias por tus palabras Esteban, que gusto saber de ti. Cuando uno toma decisiones sabe que traerán consecuencias positivas o negativas, en este caso han sido muy positivas aunque aún hay muchos retos por vencer y mucho camino por andar pero recordando siempre donde tengo puesta mi fe. A los dos les mandamos un abrazo muy fuerte.

Deja un comentario





Vuelve al comienzo