Puedes reescribir la política, pero no puedes deshacer el daño
Por Tyler Wilcox
Enviado a Afirmación después de la reversión de la política de Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días de noviembre de 2015 que prohibieron que los hijos de padres LGBTQ sean bendecidos y bautizados y rotuló como apóstatas a los miembros de la Iglesia que entran en matrimonios con personas del mismo sexo. Estos cambios se conocieron dentro de la comunidad mormona LGBTQ como la «política de exclusión», «política de noviembre de 2015» o «PoX». El día después de que se anunció la reversión de esta política, Nathan Kitchen, presidente de Afirmación, invitó a todos los que deseen compartir sus sentimientos auténticos y experiencias de dolor, ira, alivio, tristeza, felicidad, confusión, sea lo que sea lo que hayan sentido con la reversión de esta política. «Como Presidente de Afirmación, quiero estar seguro de que Afirmación no te oculta, ni a ti ni a tus experiencias, a medida que avanzamos.», escribió Kitchen en su invitación. Si tienes una historia para compartir acerca de la reversión de la política de exclusión, por favor envíelo a [email protected]. También puede leer otras historias de la reversión de la política de exclusión.
Entonces, ese verano de 2015, la Corte Suprema acababa de legalizar los matrimonios entre personas del mismo sexo en todo el país con su decisión sobre Obergefell vs. Hodges. Ese día, decidí que probablemente sería el mejor día en el que alguien pudiera salir del armario. Entonces, fui a Twitter y dije que tenía mucho miedo de tuitear esto, pero que era bisexual. Mayormente gay, pero no obstante, bi. Solo recibí comentarios positivos de mis amigos y tuve una conversación con mis padres cuando llegué a casa del trabajo ese día. Al día siguiente anuncié lo mismo en Facebook. Todavía estaba en la Iglesia en ese momento, así que incluí en mi mensaje que quería quedarme en la Iglesia y planeaba permanecer en el celibato.
Avance rápido al 5 de noviembre de 2015. Debo haber escuchado las noticias en el trabajo. Me quedé un poco solo durante la jornada laboral para pensar en esta política y en lo poco homologista que es. Más tarde ese día, pude hablar con algunos amigos que estaban tan molestos como yo con la política. Entonces veo gente defendiendo la política. «¡La política no es homofóbica!» «Ama al pecador, odia el pecado». «Los líderes saben lo que están haciendo porque saben lo difícil que es para las personas cuando tienen que decidir entre la Iglesia y los asuntos LGBT». Sea cual sea tu razonamiento, es discriminación.
Escuchar sobre la política me hizo enojar. Probablemente lloré Me sentí mal. Me sentí feliz y orgulloso cuando me asumí solamente para que destruyeran mi felicidad cinco meses después. Me hizo sentir suicida de nuevo. Sin embargo, quería permanecer en la Iglesia y hacer que la Iglesia funcionara para mí. Tenía una terapeuta mormonna en ese momento y ella trató de asegurarme que la política era la voluntad de Dios para nosotros. Mirando hacia atrás, creo que eso es una completa tontería de alguien que intenta defender una acción deplorable.
A principios de 2016, comencé a escuchar acerca de un montón de suicidios juveniles. Todavía mantuve la cabeza baja y quería que la Iglesia funcionara para mí. A lo largo de 2016 aprendí más sobre la historia de la Iglesia. Mi mentalidad pasó de «Necesito tomarme un descanso de la Iglesia y regresaré cuando sus políticas sobre LGBTQIA+ cambien» a «esta Iglesia es terrible y quiero retirarme». Me fui a la universidad ese otoño y renuncié a mi membresía una vez que confirmé que mis registros se habían trasladado a mi barrio de estudiantes.
Desde entonces, he estado disfrutando más mi vida fuera de la Iglesia. Ya no me siento culpable por mi sexualidad y sé que no soy menos valioso que otra persona debido a mi sexualidad. He estado tratando de mostrar a otros en mi posición que la Iglesia no es su única opción también.
Ahora, llegamos al 4 de abril y la reversión de esta política. Estoy feliz por el cambio en sí mismo, pero estos últimos 4 años han sido terribles para tanta gente. Ahora solo se ha ido y la Iglesia lo trata como si nunca hubiera sucedido. El festival Loveloud fue creado en gran parte debido a esta política. Muchos suicidios ocurrieron en gran parte debido a esta política. Yo mismo y muchos otros hemos sentido mucho dolor en estos últimos cuatro años, y ahora se ha ido y ¿ni siquiera recibimos una disculpa?
Ayer fui a Facebook para decir: «Puedes reescribir la política todo lo que quieras, pero no puedes deshacer los daños y las muertes que ya han ocurrido». Mis amigos me han consultado y he hecho lo mismo, solo para asegurarme de que estén bien después de este anuncio. Este cambio definitivamente puede reabrir las heridas de algunas personas.
A mí me parece que los miembros ignoran la parte mala de la Iglesia. Entonces, cuando algo como esto sucede, es alabado como una revelación y una promoción de la fe. Sus actitudes van desde «estás haciendo que sea peor de lo que realmente es» a «¡Los líderes están tan inspirados!» Cuando fuimos a hablar en contra de esta política homofóbica, estábamos persiguiendo a los miembros y estábamos simplemente enojados porque dejamos la Iglesia para pecar.
Estoy enojado por todo el daño que esto ha causado, solo para que se deshaga cuatro años después. Realmente desearía que la política no se hubiera puesto en marcha en primer lugar. Mi madre incluso dijo que este es un buen paso de bebé y espero que lo sea, pero no estoy tan seguro. Me pregunto si este cambio podría causar más dolor porque ahora las personas LGBTQ se sentirán más cómodas en la Iglesia y luego, cuando estén realmente arraigadas en ella, se enterarán de la dura verdad de la Iglesia de que los «actos homosexuales» están en segundo lugar entre los pecados graves, justo después del asesinato, y entonces sea demasiado tarde para dejar la iglesia
Entonces, esa es mi historia, diría yo. Ha sido una mierda algunas veces y ha sido buena otras veces. Tuve un novio por un tiempo y eso fue bueno. Todo lo que puedo esperar en el futuro es que la Iglesia seguirá siendo cada vez menos homofóbica y transfóbica. Ayudaré a los demás tanto como pueda hasta entonces.